Las puertas siempre nos han hecho reír.

Así en frío, parece que no tiene mucho sentido, pero déjame que te cuente.

¿No recuerdas alguna película en la que tras una puerta entreabierta había colocado un cubo de pintura para que le cayera al siguiente en abrir? Es uno de los gags más típicos.

En los dibujos animados cuántos portazos hemos visto… la pantera rosa, el pobre Coyote, al pato Donald… solo de recordarlo me río.

Mención especial un gag de otro planeta. En la película “Charlot en el Balneario” (The Cure), en los primeros minutos, hay una escena en la que Charlot se enfrenta con una puerta giratoria. Si no la habéis visto os la recomiendo, prácticamente es en el primer minuto.

Y el rey de las puertas Homer Simpson. En esa pobre cabeza han chocado la puerta del garaje de su casa, la del bar de Moe, las puertas automáticas del Badulaque y sobre todo las barreras automáticas de entrada a la Central Nuclear del Sr. Burns.

De todos es sabido que la seguridad no es el punto fuerte de Homer Simpson, pese a que sea su trabajo.

En Aramatica, como bien sabrás, nos dedicamos al montaje, reparación y mantenimiento de puertas automáticas y si hay algo que nos tomamos muy en serio es la seguridad.

Por ejemplo, en las barreras automáticas para el control de entrada:

  • Los brazos son ovales: en el hipotético caso de golpe, son menos dañinos que uno con esquinas
  • Hay kits de luces leds para su rápida identificación, incluso en condiciones de poca luz
  • Hay células de detección de obstáculos, no cierran si hay algo en su camino
  • Se pueden automatizar con sistemas de lecturas de matrículas para controlar vehículos no autorizados y dando mayor velocidad a los accesos permitidos
  • Capaces de trabajar de manera intensiva soportando diferente número de ciclos al día dependiendo de tus necesidades

Nos encanta, reírnos y nos encanta Homer Simpson, pero si por nosotros fuera: “Homer tranquilo, ningún accidente más con la barrera de entrada de la central”

Tu seguridad en las puertas de tu casa.